El género humano es extraordinario, de eso no cabe duda. Pero a veces, incluso a aquellos que se salen de la norma -por incongruente que parezca- les ataca la mediocridad. Ese no es el caso de Nancy Cunard
Nancy nació en 1896 en el seno de una familia inglesa acomodada. Ella, sabedora de que otro mundo era posible, rechazó su procedencia y comenzó su lucha contra el racismo y el fascismo. Incluso publicó varios trabajos acerca de la guerra civil española.
En los años 20, se trasladó a París donde se hizo amiga de gente tan influyente como Man Ray o Aldous Huxley. Este ambiente le sirvió como motor de inspiración, y pronto comenzó a publicar sus primeros poemas, establenciendo años más tarde su propia editorial: Hours Press. En ella, comenzó a apoyar y descubrir nuevos talentos, entre ellos Samuel Beckett.
Nancy era excepcional incluso a la hora de vestir, y por ello, cubría sus brazos con enormes brazaletes que traía de sus viajes. Pero esta, como casi todas las buenas historias, tiene un final desgraciado ya que durante sus últimos años, Nancy, sufrió varias enfermedades mentales agravadas por sus adicciones al alcohol y las drogas.
1 comment:
Vaya no sbaia mucho de ella..me gusta eso de las pulseras aunque lastima por su tragico deceso. Besos Fashion
Ojala puedas pasarte por mi blog
Post a Comment